CAPITULO 15

 Daniela:

Habían pasado ya cinco días desde la fiesta, cada mañana me preguntaba si sería el día en el que por casualidad volviéramos a ver a los dos niños que conocimos.
Era sábado y era el cumpleaños de Paula, cumplía nueve años y dijo que quería ir al parque acuático así que Nico nos convenció para que fuéramos con él, su hermana y Berto, que también iría. Teníamos las entradas ya compradas para evitar hacer cola. 
Cuando bajamos las escaleras Paula ya estaba preparada para irnos, estaba muy contenta y alegra, la felicitamos y nos dio un abrazo a cada una. Solo nos dio tiempo de desayunar algo rápido porque Berto estaba esperándonos fuera. Íbamos a ir en su coche, él y Nico ya tenían carnet de conducir.

Una vez en el parque acuático, dejamos en la zona del césped las toallas y las bolsas, nos quitamos la ropa y nos quedamos en bañador, yo me puse un bikini turquesa que me gustaba mucho como me quedaba, y corriendo nos fuimos a las atracciones.
- yo quiero ir allí- dijo Paula señalando un tobogán cubierto muy alto que acababa en una piscina redonda
- tú mandas enana, es tu cumple - dijo Nico
Y así transcurrió la mañana de una atracción a otra sin parar, cuando eran sobre las tres de la tarde nos empezó a entrar hambre, por lo que descansamos a la sombra, donde teníamos las toallas y comimos unos bocadillos que nos habíamos preparado.
- tápate los ojos- le dijimos Laura y yo a Paula
La niña hizo lo que le dijimos y Nico nos miró con  extrañeza, pues no sabía lo que nos traíamos entre manos.
- ¡felicidades!- gritamos sacando una tarta de chocolate que habíamos hecho el día anterior y le colocamos nueve velas.
- ¡gracias!- dijo Paula sonriendo y muy agradecida, Berto enseguida empezó a cantar el cumpleaños feliz, pero Paula no le dejaba porque le daba vergüenza que todo el mundo de alrededor la mirase.
- anda enana ahora tienes que pensar un deseo antes de soplar las velas.- dijo Nico
Encendimos las nueve velas que había en la tarta y Paula las sopló muy entusiasmada, luego nos abrazó a todos
- Paula se te empiezan a notar las arruguitas en la cara de lo vieja que eres eh- bromeó Berto, la verdad es que se llevaban muy bien, y como Berto siempre estaba con Nico, sería para Paula como otro hermano mayor, además siempre estaban riendo y a Berto le gustaba jugar con ella.
- mentiroso- dijo la niña aparentando enfado pero riéndose
Después de comer Laura y Paula se fueron a los toboganes porque la niña quería seguir montándose en atracciones. Berto se quedó dormido al sol y Nico y yo nos quedamos hablando un rato, hasta que le entraron ganas de ir también a las atracciones.
-¿vamos allí?- me preguntó Nico señalando una atracción en la que se veia a gente tirándose por una cascada en barquitas.
- mejor esperamos a que estemos todos ¿no?
- ahora vendrán, además no creo que Berto se despierte así que vamos nosotros mientras
- vaaale- dije levantándome de la tumbona.

Nos pusimos en la enorme cola de la atracción pero nos encontramos a Laura y a Paula un poco más al principio de la cola así que nos pusimos a su lado y nos colamos.
- Paula tu eres muy chica para subir a este tipo de atracción ¿seguro que no quieres que me monte contigo?
- no hace falta, quiero subir con la prima, tú con Daniela
Los dos nos miramos y nos reímos la niña era muy graciosa.
Se montaron ellas en una barca y las vimos desaparecer por la cuesta que subía a lo más alto de la atracción. Enseguida era nuestro turno. Nico se sentó en el sitio delante y yo detrás. 

La barca empezó a moverse y yo del impulso me caía hacia atrás pero hacía un esfuerzo para no agarrarme a él porque me daba vergüenza.
- Dani que ya queda poco para la cascada ¡agárrate!- dijo bromeando.
- ¿yaa? Avísame ¿eh?
- si si yo te aviso
Y de repente estábamos cayendo a toda velocidad empapándonos y yo sin ser consciente de ello acabé agarrada a su cintura y con los ojos cerrados muy fuerte, realmente me estaba dando un poco de miedo.
- Daniela yo encantado de que me agarres pero nos tenemos que bajar ya, que se ha acabado
- si.. Lo siento- dije avergonzada y el hizo un gesto mostrándome su perfecta sonrisa
Cuando bajamos estábamos empapados y Paula y Laura nos estaban esperando donde se recogían las fotos.
- mira ahí estamos- dijo Nico señalando una de las fotos en la pantalla - sales muy guapa con la cara de velocidad - dijo susurrando sin que los demás le pudieran oír.
- ¡qué dices! Si salgo con una cara…
- bueno, es la que tienes tampoco se puede pedir mucho
-¡idiota!- dije riéndome.

Paula insistió en comprar las fotos aunque yo realmente no quería, pues salía realmente mal. Cuando llegamos a donde estaban las cosas Berto seguía dormido. Laura fue corriendo hacia él y se tiró encima suya despertándole. Recogimos las cosas y nos fuimos. La tarde había sido muy cansada pero nos lo habíamos pasado genial por el cumple de Paula que era lo que contaba. Cuando llegamos a casa no estaban los tíos de Laura, nos habían dejado una nota en la nevera explicándonos la cena.

Laura y yo nos tumbamos en el sofá y nos pusimos a ver la tele. Berto y Nico se fueron a sacar a Pluto con Paula, dijeron que no tardarían mucho y que preparásemos nosotras la cena mientras tanto.
Hacía una noche maravillosa así que comimos todos en el patio tranquilamente y poco después nos fuimos a la cama.